Algunas enseñanzas falsas prometen a los cristianos salud y riqueza en esta tierra.
En realidad, nuestro mundo físico, incluídos nuestros cuerpos, han estado sujeto a la enfermedad, la muerte y el deterioro desde la caída de la humanidad.
Pablo lo llama “ la esclavitud de la corrupción” y dice, “considero que en nada se comparan los sufrimientos actuales con la gloria que habrá de revelarse en nosotros.” (Romanos 8:18-26).
Cristo le dio a los creyentes el gobierno sobre todas las cosas, “Ahora bien, es cierto que todavía no vemos que todo le esté sujeto.”(Hebreos 2:6-8). Por eso es que Jesús mismo dijo que tendríamos problemas en el mundo (Juan 16:33).
Las falsas enseñanzas ofrecen salud y riqueza durante esta partícula de tiempo que vivimos sobre la tierra. Las Escrituras ofrecen Gloria eterna:
“ Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día. Pues los sufrimientos ligeros y efímeros que ahora padecemos producen una gloria eterna que vale muchísimo más que todo sufrimiento. Así que no nos fijamos en lo visible, sino en lo invisible, ya que lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es eterno.” 2 Corintios 4:16-18
Cuando la vida parece dura, necesitamos enfocarnos en la eternidad.
Inglés: True hope
Traducido por: Silvia Naviliat
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