En los últimos 15-20 años, muchos cristianos profesantes han pasado del camino
angosto a la senda ancha (Mateo
7:13-14).
Mientras la cultura se ha vuelto más malvada, muchas
familias están angustiadas al ver que sus seres queridos se apartan del Señor y
rechazan a amigos y familiares que se mantienen fieles a Dios (Mateo
24:12-13).
En el Salmo
55,
David le dice a Dios que sus pensamientos lo preocupan y que desearía poder
volar como una paloma lejos de todo. Él admite que la traición de sus seres queridos es más dura de soportar que otros tipos de traición.
Él dice: “Si un enemigo me insultara, podría
soportarlo”, pero en vez de eso es “mi compañero, mi amigo cercano, con quien
una vez disfruté dulce compañerismo en la casa de Dios”.
Cuando alguien cercano a nosotros rechaza a Dios, es
un dolor difícil de soportar. David comparte honestamente su pena e incluso su
enojo con respecto a este tipo de traición. Pero él concluye con esta
importante verdad:
“Entrégale tus afanes al Señor y él te sostendrá;
no permitirá que el justo caiga y quede abatido para siempre.”
Antes de que me sucediera, yo habría pensado que no podría
manejar el ver a varios de mis seres queridos rechazar a Dios y rechazarme a mí. En
lugar de eso, la tragedia de sus decisiones me ha enseñado a entregarle mis
afanes al Señor y he aprendido que Él verdaderamente puede sostenerme.
Con la ayuda de Dios, estas dolorosas traiciones
pueden fortalecer nuestra fe (Romanos
8:28; 1
Pedro 1:3-7).
Si estás experimentando este tipo de pena, oro para
que entregues tus preocupaciones al Señor.
Inglés: How Can We Bear Watching Loved Ones Reject the Lord?
Traducido por: Silvia Naviliat
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