Romanos 12 es un capítulo rico con verdades
maravillosas que nos transforman. Por ejemplo, los primeros dos versículos
comparten estas poderosas realidades:
1.
Los cristianos son motivados por el amor sacrificial de Dios.
Tú
y yo estábamos en el “corredor de la muerte,” culpables en nuestros pecados,
mereciendo la muerte eterna (Romanos
3:23).
Pero Jesús dio un paso adelante y tomó nuestro lugar. A Él le debemos nuestras
vidas (1
Corintios 6:20; 7:23).
“Por lo tanto, hermanos,
tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes,
en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y
agradable a Dios.” Romanos
12:1
Si
alguien rechaza a Dios debido a las dificultades y las pruebas, nunca lo
conoció en primer lugar. Dios no nos debe nada. Nosotros le debemos todo.
2.
Los cristianos nos estamos transformando, no conformando.
El
mundo nos está tentando constantemente a menospreciar o rechazar nuestra fe.
Nosotros tenemos que hacer más que resistir. Debemos transformar nuestra mente
con la verdad de Dios.
“No se amolden al
mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así
podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.” Romanos
12:2
Si
estamos genuinamente agradecidos por nuestra salvación, permitimos que Dios
transforme nuestros corazones y mentes para que podamos entender lo que le
agrada a Él.(Filipenses 2:12-13).
Romanos
12:1-2 en pocas palabras: La vida cristiana = gratitud y transformación.
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Inglés: Romans 12:1-2: Grateful and transforming
Traducido por: Silvia Naviliat
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