Diciéndole a Dios qué es lo mejor para nosotros


¿En quién vas a confiar?



Es una gran ironía pensar que podemos decirle a nuestro Creador lo que es bueno para nosotros. 

Pero está sucediendo más y más.

Las personas dicen que pueden aceptar a Dios como Creador y Señor, pero rechazan las enseñanzas de la Biblia sobre la pureza sexual, el matrimonio, los roles de género, la humildad, el infierno,etc.
La gente parece pensar que hemos “evolucionado” a una manera de pensar más alta, más humana, más inteligente, cuando en realidad estamos repitiendo actitudes que destruyeron vidas y naciones en el pasado. 

Estamos siendo sencillamente tontos al pensar que podemos amar a Dios mientras ignoramos y redefinimos Sus principios y mandamientos.

Dios no nos llamó a la impureza, sino a la santidad; por tanto, el que rechaza estas instrucciones no rechaza a un hombre, sino a Dios, quien les da a ustedes su Espíritu Santo.” 1 Tesalonicenses 4:7-8

Dios nos ama genuinamente. Sus leyes prohíben conductas que dañan nuestro corazón y nuestra alma.

Él sabe qué es lo mejor para nosotros. 
Nosotros no somos Sus pares y nuestras opiniones no cambian Su verdad.
Traducido por: Silvia Naviliat



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