Estudios en los primates muestran que la paciencia no es determinada por la historia, el comportamiento social o el tamaño del cerebro, sino por cómo es adquirida la comida. Las especies que esperan las plantas de temporada son más pacientes que aquellas que se alimentan de insectos.(fuente)
Los primates que comen plantas están obligados a "practicar" la paciencia.
Practicar la paciencia es bueno para los humanos también. Desafortunadamente, la tecnología de alta velocidad nos enseña a practicar la impaciencia.
Estudios recientes mostraron que el 25% de los usuarios salen de un sitio si tienen que esperar 5 segundos para que un video cargue. A los 10 segundos la mitad ha salido (fuente).
Y esta demanda de resultados instantáneos está afectando todas las áreas de nuestra vida.
Leemos menos, ahorramos menos dinero, y a un investigador "le preocupa que un día la gente será demasiado impaciente para llevar a cabo estudios sobre la paciencia." (fuente)
La paciencia es un fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-23), y la única manera de desarrollarla es a través de situaciones que nos hagan esperar y ejercitar el autocontrol.
Entonces, la próxima vez que empieces a ponerte impaciente, respire, ora y "practica" la paciencia.
Inglés: The evolution of patience
Traducido por: Silvia Naviliat
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