Cristo dice que sólo aquéllos que mueren a sí mismos encontrarán verdadera vida en Él (Mateo 16:25). De hecho, Él dice que aquéllos que rehúsan morir a sí mismos no son dignos de Él (Mateo 10:38).
Un aspecto de morir a nosotros mismos es morir a los propósitos egoístas de nuestras vidas.
Ésto no significa que todos nos enrolemos como misioneros extranjeros. Dios no llama a todos al trabajo cristiano profesional, pero Él tiene planes y propósitos para cada uno de nosotros.
“ Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica.” Efesios 2:10
Veamos algunos elementos de esta maravillosa promesa:
1. Somos capaces. Somos obra de Dios, Su obra maestra. Él nos ha dado los dones que necesitamos para cumplir los propósitos que Él ha diseñado para nosotros (Efesios 4:7-8).
2. Somos creados en Cristo Jesús. No podemos hacer nada de valor apartados de Cristo (Juan 15:5).Pero podemos hacer cualquier cosa que Él nos llame a hacer (Filipenses 4:13).
3. ¡Dios ha diseñado cosas específicas para que nosotros hagamos! ¡Qué genial!
La elección es nuestra: Sus propósitos o los nuestros.
Y la belleza de esta promesa es: ¡Cuando morimos a nosotros mismos, Sus propósitos se vuelven nuestros propósitos!
Inglés: ¨Dead¨people have new purposes
Traducido por: Silvia Naviliat
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