Autocompasión: "infelicidad excesiva, enfocada en uno mismo, por nuestros
propios problemas."
A
veces cuando estoy lidiando con una situación difícil, me rindo a la autocompasión.
Pero la autocompasión nunca es algo bueno. Es un destructivo desperdicio de
tiempo.
Pablo
dijo que una vez estaba tan desanimado que sentía que no podía seguir (2
Corintios 1:8-10). Pero él no se abandonó a la autocompasión. En vez
de eso, él le entregó todo al Señor. Y eso es lo que debemos hacer.
La
autocompasión es centrada en uno mismo, autoindulgente, autocomplaciente y
autodestructiva. Es pecado.
La
superamos:
1. Perdonando a otros (Mateo
6:14-15).
2.
Negándonos a nosotros mismos (Lucas
9:23).
3.
Pensando en otros (Filipenses
2:3-4).
4. Fijándonos en lo positivo (Filipenses
4:8).
5.
Recordando que Dios usa lo malo para bien (Romanos
8:28).
6.
Recordando que Dios quiere consolarnos en las dificultades (2
Corintios 1:3-7).
7. Avanzando (Filipenses 3:10-14).
Que
Dios nos ayude a hacer estas cosas cada vez que la autocompasión empiece a
apoderarse de nuestros pensamientos. Él es capaz, a
través de Su gran poder que trabaja dentro nuestro, de
lograr infinitamente más de lo que pedimos o imaginamos (Efesios
3:20).
Inglés: Such a Pity, Not a Party
Traducido por: Silvia Naviliat
No comments:
Post a Comment