El término “talón de Aquiles”se origina en la mitología griega pagana, viniendo
de una historia extraña y ficticia de una madre que metió a su bebé al río que
se supone protegería su vida. Sin embargo, como ella lo sostuvo del talón. Él
permaneció vulnerable en esa parte de su cuerpo y lo mataron a una edad
temprana con una flecha envenenada lanzada a su talón.
Desde los 1800s el “talón de Aquiles” ha
sido usado para describir algo aparentemente insignificante que gradualmente
destruye a una persona, negocio o nación.
La Escritura expresa esta verdad en una
forma un poco diferente:
“El que es fiel en lo poco también lo será en lo
mucho; y el que no es honrado en lo poco tampoco lo será en lo mucho.” (Lucas 16:10).
Satanás apunta a pecados que nosotros
pensamos que son insignificantes. Él sabe que se pueden transformar en nuestro
“talón de Aquiles” (Efesios
6:10-18).
Entonces pidámosle a Dios que nos ayude
a identificar estos pecados para poder tratar con ellos agresivamente a través
de la oración y la Palabra de Dios.
Y memoricemos Lucas
16:10 y 1
Timoteo 1:18-19 como parte de nuestra defensa.
💙💙💙
“Timoteo, hijo mío, te doy este
encargo porque tengo en cuenta las profecías que antes se hicieron acerca de
ti. Deseo que, apoyado en ellas, pelees la buena batalla y mantengas la fe
y una buena conciencia. Por no hacerle caso a su conciencia, algunos han
naufragado en la fe.” (1 Timoteo 1:18-19).
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