Un solo versículo en Efesios Uno
Alguna vez has reflexionado en las maravillosas verdades de este versículo:
“ Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor
Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición
espiritual en Cristo.” (Efesios
1:3).
Piensa en esto—cuando venimos a Cristo,
nos volvemos nuevas criaturas, completamente salvas y completamente perdonadas.
No puede haber mayores bendiciones que esas.
Cuando enfrentamos luchas, confusión,
pruebas y persecución aquí en la tierra:
✔ Perseveramos porque
tenemos confianza en lo que
esperamos, y tenemos certeza de lo que no vemos. (Hebreos
11:1).
✔ Nos enfocamos en esas
bendiciones eternas, sabiendo que esta tierra no es nuestro hogar (Hebreos
11:16).
✔ Buscamos
almacenar tesoros en el cielo como “ un seguro fundamento para el futuro” (1
Timoteo 6:17-19).
✔ Tenemos paz
mental cuando enfrentamos dificultades porque sabemos que Cristo ha vencido al
mundo (Juan
16:33).
✔ Lo mejor de
todo, sabemos que cuando nuestros problemas terrenales terminen, nuestro
corazón y nuestra mente serán completamente transformados y entenderemos cosas
que nos confunden aquí en la tierra (1
Juan 3:2; 1
Corintios 13:12).
“ Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor
Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición
espiritual en Cristo.” (Efesios 1:3).
Inglés:A Single Verse in Ephesians One
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